En un pronunciamiento sin precedentes durante el gobierno de Gustavo Petro, la Cancillería, liderada por Luis Gilberto Murillo, envió un mensaje contundente al régimen de Nicolás Maduro, reclamando por el impacto del fenómeno migratorio venezolano en Colombia y reiterando el apego a los principios del derecho. internacional.

“Colombia reafirma su compromiso inequívoco con la defensa de los derechos humanos y el Derecho Internacional Humanitario, especialmente en el contexto de la situación en Venezuela”, expresó la entidad en un comunicado emitido este lunes 16 de diciembre.

El mensaje subraya que la crisis política y humanitaria en Venezuela ha convertido a Colombia en un país de tránsito y acogida para millones de migrantes. La Cancillería se enfatizó en su solicitud a Venezuela para que respetar los principios del derecho internacional, al tiempo que expresó su preocupación por la situación de seis solicitantes de asilo político actualmente bajo custodia en la sede diplomática de Argentina en Caracas, con apoyo de Brasil.

Desde marzo, Colombia y Brasil intentaron mediar en este incidente diplomático, ofreciendo protección a los asilados, pero los esfuerzos no prosperaron. El comunicado también reiteró la postura colombiana ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, pidiendo a Venezuela reincorporarse al Sistema Interamericano de Derechos Humanos como un paso esencial para garantizar la estabilidad política en la región.

El pronunciamiento llega en un contexto de tensiones entre el canciller Murillo y el presidente Petro. Según trascendió, Murillo se habría distanciado del mandatario por diferencias relacionadas con decisiones diplomáticas, como el fallido nombramiento de Daniel Mendoza como embajador en Tailandia. Además, el comunicado parece una respuesta directa a las críticas del expresidente Juan Manuel Santos, quien cuestionó la falta de contundencia del gobierno colombiano frente al régimen de Maduro.

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“El gobierno colombiano no ha dicho ni una palabra frente a la oprobiosa situación que el régimen de Maduro le ha impuesto a la embajada de Argentina”, señaló Santos recientemente, acusando al Ejecutivo de ambivalencia y complicidad.

Aunque el canciller Murillo aseguró respetar la soberanía y autodeterminación de los venezolanos, insistió en la necesidad de garantizar los derechos humanos para lograr la estabilidad en la región, en lo que parece ser una estrategia política de cara a futuras aspiraciones electorales.